Queratosis actínica: ¿Qué es y cómo tratarla?
La queratosis actínica, también conocida como queratosis solar, es una lesión cutánea precancerosa que se desarrolla en áreas de la piel expuestas de forma crónica a la radiación ultravioleta (UV) del sol.
¿A quiénes afecta la queratosis actínica?
Aunque puede afectar a personas de todas las edades, es más común en adultos mayores de 40 años que han estado expuestos al sol durante largos períodos de tiempo. Las personas de piel clara, con antecedentes familiares de cáncer de piel o con un sistema inmunitario debilitado también tienen un mayor riesgo de desarrollarla.
Síntomas de la queratosis actínica:
Las queratosis actínicas se presentan como pequeñas manchas ásperas y escamosas en la piel. Suelen ser de color rojo, marrón o rosado, y pueden causar picazón, ardor o sensibilidad.
Prevención de la queratosis actínica:
La mejor manera de prevenir la queratosis actínica es proteger la piel del sol. Se recomienda usar protector solar de amplio espectro con un FPS de 30 o superior, incluso en días nublados, y evitar la exposición solar prolongada, especialmente durante las horas centrales del día.
Tratamiento de la queratosis actínica:
El tratamiento para la queratosis actínica varía según el caso y puede incluir la aplicación de cremas tópicas, la crioterapia (congelación), la terapia fotodinámica o la extirpación quirúrgica. Es importante consultar a un dermatólogo para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado.