El ejercicio físico juega un papel crucial en la mejora de la salud y el tratamiento de diversas enfermedades, incluido el mieloma múltiple. Hipócrates afirmó una vez que "el deporte es preservativo de la salud", lo cual es especialmente relevante para los pacientes con enfermedades tumorales como el mieloma.
La masa muscular desempeña un papel vital en la protección y la activación del cuerpo frente a diversas agresiones. Además de permitir el movimiento, la masa muscular actúa como un reservorio de proteínas, lo que la convierte en un componente esencial para mantener la salud general. **La pérdida de masa muscular puede tener graves consecuencias, como un **sistema inmunitario debilitado, dificultad para cicatrizar heridas, úlceras y un mayor riesgo de infecciones.
Es fundamental que los programas de ejercicio sean personalizados y supervisados, ya que cada paciente de mieloma es único y puede presentar diferentes necesidades y limitaciones. La prescripción de ejercicio debe adaptarse a las condiciones individuales de cada paciente, teniendo en cuenta su estado de salud, nivel de actividad física y capacidades.
Diferencias entre deporte, actividad física y ejercicio
Es importante diferenciar entre deporte, actividad física y ejercicio. Mientras que el deporte se refiere a actividades competitivas, la actividad física abarca cualquier movimiento del cuerpo que requiere energía, desde caminar hasta bailar. Por otro lado, el ejercicio físico es una actividad planificada y estructurada con el objetivo de mantener y mejorar la forma física.
Los objetivos del ejercicio en pacientes con mieloma incluyen el aumento de la fuerza muscular, la mejora de la movilidad general, el fortalecimiento del sistema cardiorrespiratorio, la reducción del dolor y la mejora del estado de ánimo.
Es crucial evaluar la capacidad física y nutricional de cada paciente antes de iniciar un programa de ejercicio. Esto puede incluir pruebas de fuerza, resistencia aeróbica y flexibilidad, así como una evaluación del estado nutricional y la ingesta calórica. El plan de ejercicio debe adaptarse a las capacidades y necesidades individuales de cada paciente, con especial atención a la prevención de lesiones y la detección temprana de síntomas adversos.
Recomendaciones para realizar ejercicio
Se recomienda una combinación de ejercicios aeróbicos, de fuerza, de flexibilidad y de coordinación, adaptados a las capacidades de cada paciente. Es importante calentar antes de realizar ejercicio, controlar la respiración durante el entrenamiento y estirar los músculos después de la actividad física. Cualquier síntoma adverso debe ser reportado al médico para una evaluación adecuada.
Una poderosa herramienta para la salud
El ejercicio físico es una herramienta poderosa para mejorar la salud y el bienestar de los pacientes con mieloma múltiple. Con un enfoque personalizado y supervisado, el ejercicio puede contribuir significativamente a la calidad de vida y al manejo de la enfermedad.