Cola de caballo: Propiedades, beneficios y cómo tomarla
La cola de caballo es una planta medicinal con una larga historia, incluso se han encontrado fósiles que demuestran su existencia en la época de los dinosaurios. Su nombre científico es Equisetum arvense y se caracteriza por sus tallos huecos y articulados.
Gema Pons, farmacéutica y vocal de Plantas Medicinales del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Tarragona, nos explica en este artículo los beneficios de esta planta y cómo debemos tomarla.
Propiedades y beneficios de la cola de caballo
Esta planta es rica en minerales como el silicio, potasio y magnesio, además de contener flavonoides y alcaloides. Estos componentes le confieren propiedades diuréticas, remineralizantes y antioxidantes.
Entre sus beneficios más destacados se encuentran:
Acción diurética: Favorece la eliminación de líquidos, siendo útil en casos de retención de líquidos, cistitis o infecciones urinarias.
Fortalece huesos, uñas y cabello: Gracias a su contenido en silicio, contribuye a la salud ósea y a mejorar la apariencia de la piel, uñas y cabello.
Efecto antioxidante: Ayuda a combatir el daño celular provocado por los radicales libres, gracias a su contenido en flavonoides.
Cicatrizante: Tradicionalmente se ha utilizado para favorecer la cicatrización de heridas y quemaduras leves.
¿Cómo se toma la cola de caballo?
La cola de caballo se puede encontrar en diferentes formatos:
Infusión: Se prepara añadiendo una cucharada de planta seca por taza de agua caliente. Se deja reposar unos minutos y se filtra antes de beber.
Cápsulas o comprimidos: La dosis recomendada varía según el laboratorio, por lo que es importante seguir las indicaciones del fabricante.
Extracto líquido: Se diluye en agua según las indicaciones del producto.
Es importante destacar que la cola de caballo no está exenta de contraindicaciones, por lo que se recomienda consultar con un profesional de la salud antes de iniciar su consumo, especialmente en caso de embarazo, lactancia o si se padece alguna enfermedad.