Diarrea del viajero: prevención y el papel de los probióticos

La diarrea del viajero es una afección frecuente que puede afectar a quienes viajan, especialmente a zonas con condiciones sanitarias diferentes.

Diarrea del viajero: causas y prevención

Esta afección se origina principalmente por bacterias como la Escherichia coli, virus y protozoos. Para prevenirla, es crucial seguir estas medidas:

• Consumir alimentos bien cocinados.

• Evitar alimentos crudos, especialmente carnes y mariscos.

• Pelar las frutas antes de comerlas.

• Optar por productos lácteos pasteurizados.

• Beber agua embotellada sin hielo.

• Lavarse las manos con frecuencia, especialmente antes de comer.

El papel de los probióticos en la diarrea del viajero

Los probióticos son microorganismos vivos que, al consumirse en cantidades adecuadas, pueden aportar beneficios para la salud intestinal. Aunque aún se necesitan más estudios, algunos sugieren que los probióticos podrían ser útiles en la prevención de la diarrea del viajero.

Se cree que los probióticos podrían actuar de las siguientes maneras:

• Fortaleciendo la microbiota intestinal, la comunidad de microorganismos que habitan en nuestro intestino y que desempeñan un papel fundamental en la digestión y la inmunidad.

• Reduciendo la colonización de patógenos, es decir, impidiendo que las bacterias dañinas se instalen en el intestino.

Manejo de la diarrea establecida

Si la diarrea ya se ha presentado, es fundamental prevenir la deshidratación. Para ello, se recomienda el uso de soluciones de rehidratación oral, que contienen agua, sales y azúcares en las proporciones adecuadas para reponer los electrolitos perdidos. En casos graves, puede ser necesario recibir atención médica.

En situaciones que requieren tratamiento con antibióticos, el uso de probióticos podría ayudar a minimizar los efectos secundarios gastrointestinales, como la diarrea asociada a antibióticos.

Es importante recordar que la información proporcionada en este artículo es solo de carácter informativo y no debe sustituir el consejo médico profesional. Si tienes dudas o experimentas síntomas persistentes, consulta a un profesional de la salud.