Necesidades crecientes en nuestro país, la discapacidad y la dependencia de las personas mayores

La Fundación AstraZéneca presenta el proyecto del "Libro Verde sobre la Protección de las Personas Dependientes". Este documento de carácter multidisciplinar se pondrá a disposición de los poderes públicos españoles nacionales, autonómicos y europeos a finales de 2003, declarado Año Europeo de la Dependencia, o a principios de 2004, siendo una iniciativa que pretende dar respuesta a una necesidad creciente en nuestro país, el problema de la discapacidad y la dependencia de las personas mayores.

En la realización del Libro Verde, que Julio Sánchez Fierro, patrono de la Fundación AstraZéneca, califica de «aportación pionera», han participado expertos y afectados de muy distinta índole (sociólogos, especialistas en nuevas tecnologías, organizaciones de discapacitados y de familiares, economistas, colegios profesionales, y el Defensor del Paciente entre otros) y recogerá aquellos aspectos, estudios, vivencias, debates y propuestas de acción que los autores consideren más idóneas sobre el asunto de la discapacidad y la dependencia, así como una evaluación de los costes asociados y de su posible financiación.

Tal y como explica Sánchez Fierro, «más de tres millones y medio de personas en nuestro país sufren algún tipo de discapacidad o son dependientes». Además, el número de familias afectadas por este problema supera los ocho millones. A nivel Europeo, los individuos con dependencia de otras personas son alrededor de unos cuarenta millones. Por ello, Sánchez Fierro insiste en que «las respuestas del Libro Verde se darán en clave europea». Y es que la dependencia de las personas mayores o discapacitadas no es sólo una problemática española. En términos numéricos, se espera que su prevalencia en Europa aumente en 10 u 11 millones de casos con la incorporación de nuevos candidatos a la UE.

Contenidos del Libro Verde

«¿Qué es ser persona dependiente?», «Causas de la dependencia, modelos de financiación (europeo, nacional, autonómico) para hacer frente al cuidado de personas dependientes» o «Normativa en la Unión Europea» son algunos de los puntos de este libro que además trata temas a nivel global como el poder de las nuevas tecnologías o el papel de los profesionales y de las organizaciones representantes de personas afectadas por la dependencia, concluyendo finalmente con la propuesta de un plan de acción.

Además, el texto también recoge en uno de sus apartados aspectos demográficos, estadísticos y sociológicos de la dependencia. Datos similares a los que ofrece la última «Encuesta sobre Discapacidades, Deficiencias y estado de Salud» realizada en España en 1999 según la cual más del 32 por ciento de las personas mayores de 65 años tiene alguna discapacidad, mientras que de entre las menores de 65 la proporción de personas con discapacidad no llega al cinco por ciento. Esta información supone que aunque el aumento de la prevalencia de las discapacidades sea continuo conforme avanza la edad, éste sólo se acelere de forma notable a partir de los 50 años.

Algo más de dos millones de las personas con discapacidad identificadas en esta encuesta son mujeres, mientras que el número de hombres con discapacidad no supera el millón y medio. Sin embargo, no en todas las edades es superior el número de mujeres con discapacidad, pues hasta los 45 años hay más varones que mujeres con este problema.

También se afirma en la encuesta que las deficiencias osteoarticulares (alteraciones mecánicas y motrices de la cara, cuello y extremidades, así como la ausencia de éstas) son la primera causa de discapacidad en la población española. Le siguen en importancia las deficiencias visuales y auditivas (18 por ciento), las mentales y aquellas que se incluyen en el grupo de deficiencias múltiples y no clasificadas (11 por ciento) mientras que tienen menor incidencia cuantitativa las deficiencias viscerales (7 por ciento), las del sistema nervioso (6 por ciento) y las del lenguaje, habla y voz (1 por ciento).