Llega la primavera, llega la alergia

29Abr. 03

Las abundantes lluvias de este invierno auguran una primavera muy complicada para los más de 6 millones de españoles con alergia al polen mientras que la escasez de alergólogos multiplica las listas de espera. La Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere que en todos los países debería haber un alergólogo por cada 50.000 habitantes. En España sólo se cuenta con un especialista por cada 150.000 personas lo que significa que sólo se cubre la tercera parte de las necesidades asistenciales.

La Sociedad de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) informa de que en este país los alergólogos sólo atienden en hospitales públicos o clínicas privadas, y no en centros de especialidades, como sí ocurre con casi todas las especialidades. Además, la SEIAC también señala como problema el déficit de especialistas. Son 450 los alergólogos de que dispone la Sanidad Pública para atender a más de 8 millones de alérgicos (seis de ellos afectados por alergia respiratoria). Estos dos factores provocan que la alergología posea una de las mayores listas de espera de pacientes.

Aunque se estima que al menos el 20 por ciento de la población tiene una predisposición hereditaria a la alergia, el verdadero desencadenante de esta enfermedad es la exposición a los elementos del entorno que la provocan. Pero la alergia tiene más causas. Los últimos estudios epidemiológicos apuntan hacia la contaminación atmosférica como uno de los principales responsables del incremento de alérgicos a los pólenes, especialmente en las ciudades. Según los expertos, a esta circunstancia se le han de sumar otros elementos como el aumento de consumo de tabaco o la falta de exposición a los gérmenes durante la infancia.

Incremento de los casos

Los expertos advierten que cada vez hay más alérgicos en las ciudades, donde los enfermos se enfrentan tanto a la contaminación como a la acción del ozono. La contaminación atmosférica produce una acción doble: actúa sobre la mucosa respiratoria aumentando su sensibilidad a factores externos y a la vez incide en los pólenes potenciando su acción alérgica. Por su parte, la acción del ozono sumada a la contaminación y al aumento de horas de sol acentúa los síntomas de los pacientes.

Hay que puntualizar sobre el crecimiento de la cifra de alérgicos, que no sólo se está dando en las franjas habituales de edad sino también en las llamadas franjas extremas. Según el doctor Javier Subiza, presidente del Comité de Alergología de la SEAIC, «años atrás el grueso de los pacientes alérgicos al polen oscilaba entre los 14 y los 30 años mientras que cada vez son más frecuentes consultas de niños de 4 o 5 años alérgicos a los pólenes». En cualquier caso, lo primero que deberá hacer el paciente será acudir al médico de Atención Primaria para que le recete un tratamiento paliativo. Luego deberá ser derivado al especialista que realizará un diagnóstico correcto. Este paso es importante ya que un mal diagnóstico o tratamiento podrían hacer que la enfermedad durara años o que se volviera crónica.

Por otro lado, menos del 10 por ciento de los alérgicos que hay en España se vacuna y según el doctor Tomás Chivato, miembro del Comité de Inmunoterapia de la SEAIC, esto se debe principalmente al desconocimiento. Según el doctor Chivato, «el 60 por ciento de los españoles afectados por alergias respiratorias no están informados de las vacunas y no saben que la inmunoterapia puede solucionar sus problemas alérgicos». Por su parte, el doctor Antonio Peláez, presidente de la SEAIC, resalta como problema el de las largas listas de espera y también recuerda que la inmunoterapia es el único tratamiento que puede modificar el curso natural de las enfermedades alérgicas. Además, es lo único que puede impedir el desarrollo de asma en los pacientes con rinitis alérgica.