Las nueces ayudan a adelgazar

21Jun. 02

Uno de los tópicos más frecuentes como el de "los frutos secos engordan" puede pasar pronto a la historia. Un estudio publicado por la revista International Journal of Obesity ha demostrado lo contrario. Una dieta mediterránea que incluya frutos secos como las nueces ayuda a perder peso y a mantener la pérdida por más tiempo.

El estudio se realizó a un centenar de personas, hombres y mujeres con sobrepeso, a las que se sometió a dos tipos de dieta. La mitad siguieron una dieta baja en grasas (un 20 por ciento de calorías procedentes de grasas), mientras que la otra mitad del grupo siguió una dieta moderada en grasas (un 35 por ciento de calorías procedentes de grasas). En este último grupo se incluyeron principalmente grasas monoinsaturadas procedentes de frutos secos como nueces, almendras o anacardos.

Ambos grupos perdieron peso de forma similar durante los primeros meses de investigación. Sin embargo, al cabo de 18 meses, el grupo que seguía la dieta que incluía frutos secos perdió hasta un total de 5,2 kilos, mientras que los que habían realizado la dieta pobre en grasas habían recuperado 1,8 kilos. Del mismo modo, los participantes de la dieta moderada en grasas fueron capaces de seguirla sin excesivas dificultades, mientras que sólo una de cada cinco personas del otro grupo fue capaz de continuar con la dieta.

Se llegó a la conclusión de que, cuanto más apetecibles fueran los alimentos mayor sería el éxito del plan de adelgazamiento, aunque éste incluya cantidades moderadas de grasas. Según la doctora Kathy McManus, directora del estudio, «cualquier dieta baja en calorías puede funcionar a corto plazo, pero necesitamos saber qué tipo de modelo alimentario puede mantener pérdidas de peso a largo plazo». Llevar una dieta requiere motivación y constancia, y precisamente una de las razones que se esgrimen habitualmente para justificar el abandono de una dieta baja en calorías es lo poco apetitosa y atractiva que resulta.

El valor de las nueces

Existen precedentes a este estudio que ya habían desmentido el tópico de que los frutos secos, y concretamente las nueces, provocan necesariamente un incremento de peso. «Los estudios realizados hasta el momento no indican que este alimento engorde, contrariamente a lo que algunos piensan», puntualizó el doctor Joan Sabaté, jefe del Departamento de Nutrición de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Loma Linda en California.

Cinco nueces peladas aportan la energía similar a la de un yogur natural, 70 gramos de patatas hervidas, una manzana, 20 gramos de lomo a la plancha o 50 gramos de pollo sin piel. De este modo, combinadas con distintos alimentos puede romperse la monotonía que acusan muchas dietas y favorecen su abandono.

Además, las nueces presentan particularidades que las hacen excelentes a la hora de prevenir enfermedades cardiovasculares. Poseen ácidos grasos omega-3 en unas cantidades que permiten equiparar las nueces a pescados ricos en este tipo de grasa.

Con este estudio se pone fin al tópico de que los frutos secos engordan y se demuestra que el peligro no se centra en los alimentos, sino en el uso que hacemos de ellos. La nueces, y en general todos los frutos secos, pueden ser introducidos sabiamente en cualquier parte de una comida sin necesidad de restringirlos únicamente a los aperitivos o los postres.