La Sociedad Española de Nefrología impulsa la detección precoz de la enfermedad renal en los análisis de sangre para intervenir de forma precoz en ella y en la morbimortalidad cardiovascular asociada

Esta iniciativa buscaría consolidar el reconocimiento de la disminución de la función renal como un factor de riesgo de enfermedad cardiovascular que ayudara a la prevención precoz de ambas. La SEN ha destacado el gran número de personas en España que sufren Enfermedad Renal Crónica, sin saberlo, un dato que pretende desvelar el estudio EPIRCE.

Durante la reciente reunión entre la Sociedad Española de Nefrología (SEN) y la American Society of Nephrology (ASH), la SEN avanzó las estrategias del Plan Nacional sobre la Enfermedad Renal que presentará a Sanidad este mismo año. Además, presentó su acuerdo con los principales laboratorios de análisis del país en colaboración con la Sociedad Española de Bioquímica Clínica para incorporar un índice de disminución de la función renal en todas las analíticas de sangre.

Este índice, que registraría una disminución en la función renal del paciente si la tuviera, se obtendría a partir de diversos marcadores comúnmente registrados en los análisis de sangre (creatinina sérica, microalbuminuria, proteinuria y creatininuria) a los que se aplicaría una ecuación con las variables de edad y sexo del paciente. Esta medida ayudaría a detectar de forma precoz la enfermedad renal en la atención primaria y ayudaría al reconocimiento de la disminución de la función renal como un importante factor de riesgo de enfermedad cardiovascular.

Actualmente, la SEN estima que la Enfermedad Renal Crónica (ERC) afecta a más de cuatro millones de personas en España, muchas de las cuáles aún no lo saben. La mitad de estas personas afectadas por ERC en España tienen una función renal por debajo del 50 por ciento, y de ellas menos de un 25 por ciento llega a diálisis. Sin embargo, la mortalidad es muy elevada, en torno del cinco por ciento anual por eventos cardiovasculares asociados, fundamentalmente.

Para la SEN, la situación es tan preocupante que requiere un compromiso firme por parte del Ministerio de Sanidad, para el que está elaborando un Plan Nacional de la Enfermedad Renal que podría estar listo este mismo 2006. Además, la SEN está llevando a cabo el estudio EPIRCE, un trabajo que intenta sacar a la luz las cifras de insuficiencia renal escondida entre la población española mayor de veinte años. Unos datos que para el Dr. De Francisco, presidente de esta sociedad, «nos darán una referencia muy seria de cuál es el estado de salud de los españoles, no sólo con respecto a su función renal, sino en la tensión arterial, los lípidos, la glucosa y muchas cosas más», afirma.

Anemia y progresión de la ERC

Uno de los temas más relevantes de esta reunión entre la SEN y la ASH fue revisar las evidencias científicas sobre el freno a la progresión de la Enfermedad Renal Crónica a través de la corrección de la anemia. Así, se repasaron los recientes estudios (como Merena, Answer o Dopps), que revelan que un porcentaje elevado de pacientes sigue presentado cifras de hemoglobina por debajo de las recomendaciones de las guías americanas y europeas.

Un dato negativo, ya que «existe evidencia de grado A que la corrección precoz de la anemia mejora significativamente la morbimortalidad, la calidad de vida y reduce el número de hospitalizaciones tanto en pacientes con insuficiencia renal progresiva como en pacientes en diálisis», defiende el Dr. Joan Fort, tesorero de la SEN y nefrólogo del Hospital Vall d´Hebrón en Barcelona.

En este sentido, el tratamiento con eritropoyetina fue defendido por su efecto corrector de la anemia y su efecto en la supervivencia de las células tubulares y vasculares, ayudando a ralentizar la progresión de la insuficiencia renal. Además, la corrección de la anemia con epoetina mejora la liberación de oxígeno a los tejidos y, según estudios, podría tener un efecto protector contra el estrés oxidativo, se destacó durante el encuentro.

Para el Dr. Fort, «la corrección precoz con agentes estimuladores de la eritropoyesis, así como la corrección concomitante de los depósitos de hierro con administración de distintos preparados de hierro parenteral» son los tratamientos de referencia para la anemia en la actualidad.