12Jul. 01
La aparición de un nuevo fármaco de fitoterapia, el catecol AR25, parece que podría acabar con los efectos secundarios asociados a los fármacos adelgazantes.
La primera línea de actuación para el tratamiento del sobrepeso es prescribir una dieta sana adaptada al paciente, baja en calorías y rica en fibras, además de poner en marcha de forma paralela un plan de ejercicio físico regular y adaptado a las posibilidades del sujeto. Pero a veces se hace necesario aplicar un tratamiento farmacológico como apoyo a estas medidas.
Las alternativas farmacológicas que, hasta ahora, el paciente ha tenido a su disposición, estaban asociadas a varios efectos secundarios como diarreas o aumento de la frecuencia cardíaca y de la presión arterial, además de tener un coste económico considerablemente elevado y que el abandono del tratamiento significaba ganar de nuevo el peso perdido.
Pero la aparición de un nuevo fármaco de fitoterapia, el catecol AR25, parece que podría acabar con los efectos secundarios asociados a los fármacos adelgazantes, además de constituir un tratamiento eficaz y seguro del sobrepeso y la obesidad. Una importante novedad debido a las pocas opciones terapéuticas que los especialistas disponen para el tratamiento del exceso de peso.
Un compuesto de origen natural
Según el doctor Miguel Ángel Rubio, endocrinólogo del Hospital Clínico de Madrid, «la llegada a España de catecol AR25 viene precedida por una importante experiencia médica en otros países de Europa», y su buena tolerancia y falta de efectos secundarios se deriva en parte a su procedencia natural ya que «procede de la Camellia sinensis , una planta que se ha utilizado durante siglos sin problemas».
Según describe la profesora Concepción Navarro, Catedrática de Farmacología de la Universidad de Granada, «el catecol AR25 es un extracto obtenido de Camellia sinensis que presenta un contenido constante en derivados polifenólicos, representados fundamentalmente por el galato de epigalocatecol (GEGC)»y presenta además «una discreta cantidad de cafeína, entre un cinco y un diez por ciento».
Este compuesto tiene una doble acción: estimula la termogénesis, es decir, el proceso por el que quemamos las grasas de forma natural y las convertimos en calor, e inhibe la absorción de grasas procedentes de la alimentación, favoreciendo el proceso de adelgazamiento pues, como explica el doctor Rubio «en la obesidad suele existir un defecto en la termogénesis, que no compensa la ingestión de alimentos y favorece la acumulación de grasa incrementando el peso corporal». Según las estimaciones de estos especialistas, el catecol AR25 aumenta el efecto termogénico en un 40 por ciento.
Por otra parte, «los catecoles presentes en el producto y la pequeña cantidad de cafeína actúan de forma distinta», añade la profesora Navarro, «aumentando y prolongando en el tiempo la acción lipolítica de la noradrenalina sobre el adipocito, lo que da lugar a un incremento del cuatro por ciento del gasto energético total del individuo», resultados similares a los de otros medicamentos de este tipo, con la diferencia de que el catecol no incrementa la frecuencia cardíaca ni la presión arterial.
Crece la incidencia del sobrepeso y la obesidad
El último estudio de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad (SEEDO) reveló que el 53,5 por ciento de la población española adulta presenta problemas de sobrepeso, extendiéndose su alta incidencia al resto de los países occidentales. Y las perspectivas afirman que en el futuro podría afectar a un tercio de la población adulta.
Según la OMS, en el año 2003 la mitad de la población europea podría estar afectada por problemas de sobrepeso. Algunas de las causas principales del aumento de la incidencia en España son, por una parte, la sustitución de la dieta mediterránea por otras menos saludables que siguen el patrón anglosajón basado en la comida rápida; y por otra parte, el incremento de los hábitos sedentarios de los individuos.
© 2024 Medicina Television S.A Spain