En la elección de los juguetes no podemos olvidar la seguridad

Uno de cada tres niños que acuden a un establecimiento de óptica presenta molestias visuales como consecuencia del uso de videojuegos. Pero los peligros no sólo pasan por el uso excesivo de estos dispositivos, sino que en el mercado hay muchos juguetes que no cumplen con la normativa de seguridad.

Los síntomas que suelen presentar son picor de ojos, lagrimeo, dolores de cabeza, enrojecimiento y fatiga visual, explica Andrés Gené, vicepresidente del Colegio de Ópticos Optometristas de la Comunitat Valenciana.

Gené ha participado este miércoles junto a la directora general de Comercio y Consumo, Silvia Ordiñaga, y el presidente de Avacu, Fernando Móner, en un acto en el que han informado sobre las recomendaciones que se deben tener en cuenta a la hora de adquirir juguetes en Navidad.

Andrés Gené ha explicado que en lo referente a la salud visual los últimos estudios señalan que los videojuegos pueden ser muy positivos para el desarrollo de la visión de los más pequeños, porque permiten mejorar la sensibilidad al contraste, así como que los niños desarrollen una memoria visual espacial más completa y que perciban con más rapidez los estímulos visuales.

Por otro lado, los videojuegos ayudan a mejorar la capacidad de concentración de los niños y contribuyen a desarrollar los reflejos y hacer más rápida la coordinación ojo-mano. Sin embargo, el presidente del Colegio de Optometristas ha señalado que estos beneficios «no implican que el niño pueda estar jugando con videojuegos sin limitación», ya que «los menores de 12 años no deben jugar más de 30 minutos al día, mientras que los más mayores pueden jugar hasta una hora diaria».

También considera «muy importante» que los niños practiquen con sus videojuegos en la televisión, ya que esto permite que la distancia entre la pantalla y sus ojos sea mayor que si juega en otros dispositivos como videoconsolas portátiles o móviles.

Por otro lado, Gené ha advertido de que hay juguetes como rifles, arcos o pistolas que lanzan proyectiles que pueden provocar lesiones oculares. Además, ha instado a los padres a que extremen las precauciones a la hora de comprar juguetes que presenten lentes o espejos que puedan concentrar la luz como lupas, telescopios, microscopios o prismáticos, ya que pueden provocar quemaduras graves en los ojos si no se utilizan de forma adecuada.

Asimismo, el presidente de Avacu ha señalado que el 70 por ciento de los productos introducidos en la Red de Alerta son productos destinados a los niños y ha vuelto a recordar la importancia de comprar en establecimientos donde «nos vendan calidad y seguridad, ya que la seguridad de los más pequeños no tiene precio».

Además, ha hecho especial incidencia en el «abuso» de las pantallas -de televisión, móvil, ordenador o consolas- por parte de los niños. En este sentido, ha coincidido con Andrés Gené en la necesidad de limitar los tiempos de juego en ordenadores y consolas, ya que junto a los efectos beneficiosos que los videojuegos tienen «una utilización excesiva puede acarrear problemas de salud y acomodación de los ojos, que puede derivar en una miopía en edad adulta».

«Consumo responsable»

Del mismo modo, la directora general de Comercio y Consumo ha trasladado la importancia de «ejercer un consumo responsable en la elección y adquisición de los productos, especialmente en el caso de los dirigidos a niños y jóvenes, ya que se trata de un colectivo de especial atención».

En su intervención, Ordiñaga ha informado también sobre la campaña de inspección realizada en el mes de noviembre por los servicios de Comercio y Consumo en materia de etiquetado de juguetes en cerca de 200 establecimientos de la Comunitat.

Ordiñaga ha señalado que ésta ha sido el primer control que se ha hecho tras la entrada en vigor del Decreto de Seguridad en el Juguete, que introduce la obligatoriedad de que en el etiquetado figure tanto el nombre del fabricante como el del distribuidor.

Entre las irregularidades detectadas, en el 13 por ciento de los productos revisados no constaba el nombre o marca del productor, en el 18 por ciento no aparecía el domicilio de éste y en el 38 por ciento no se incluía el punto de contacto de fabricante.

Asimismo, en el 42 por ciento de los juguetes inspeccionados no figuraba claramente indicada la palabra «advertencia» antes de las recomendaciones, especialmente en el caso de productos para menores de 36 meses.

Por otra parte, sólo en el 3 por ciento de los productos no disponía de etiquetado en alguna de las dos lenguas oficiales de la Comunitat Valenciana, en el 5 por ciento no se indicaba claramente si el juguete era conveniente o no para menores de 36 meses, y en el 11 por ciento no figuraba el símbolo de recogida selectiva para aparatos eléctricos, entre otros aspectos.

Juguetes retirados

Por otra parte, la directora general de Comercio y Consumo ha destacado que la Conselleria de Economía, Industria, Turismo y Empleo ha retirado este año del mercado 2.750 tipologías y productos y cerca de 88.000 unidades, de los que 34.000, un 40 por ciento, son juguetes que pueden suponer algún riesgo para la seguridad de los niños.

Los principales motivos para la retirada del mercado de estos juguetes han sido riesgo de incendio y quemaduras, lesiones cutáneas y peligro de asfixia o ahogamiento.