La lactancia materna es la forma más natural y beneficiosa de alimentar a un bebé. Proporciona todos los nutrientes que necesita para un crecimiento y desarrollo saludables, además de protegerle de enfermedades. Sin embargo, muchas madres primerizas pueden encontrar dificultades en las primeras tomas.
Consejos para la lactancia materna
Para facilitar el inicio de la lactancia materna, el Dr. Jesús Garrido, pediatra del Hospital Vithas La Salud de Granada, ofrece algunos consejos prácticos:
Un buen agarre es fundamental para que el bebé pueda extraer la leche de forma efectiva y evitar el dolor en los pezones. Se recomienda que la boca del bebé cubra gran parte de la areola, con los labios evertidos y la nariz cerca del pecho.
La frecuencia de las tomas debe ser a demanda del bebé, es decir, siempre que muestre signos de hambre. En general, los recién nacidos se alimentan entre 8 y 12 veces al día.
La duración de las tomas varía en función de cada bebé y de su capacidad de succión. Es importante dejar que el bebé se alimente hasta que se sacie por sí mismo.
El contacto piel con piel inmediatamente después del parto favorece el vínculo afectivo entre la madre y el bebé, además de estimular la producción de leche.
En caso de que la madre no pueda dar el pecho directamente al bebé, es posible extraer la leche materna de forma manual o con un sacaleches. La leche materna extraída se puede conservar en el frigorífico o congelador para su posterior uso.
Beneficios de la lactancia materna
La lactancia materna no solo beneficia al bebé, sino que también aporta ventajas para la madre, como la reducción del riesgo de cáncer de mama y de ovario, la recuperación posparto más rápida y el fortalecimiento del vínculo afectivo con el bebé.