Desde el primer día de vida, los niños están expuestos a un sinfín de estímulos. Muchos padres se preocupan por la convivencia entre niños y mascotas, especialmente durante la infancia temprana. Sin embargo, la exposición a animales desde pequeños puede ser beneficiosa para su desarrollo.
Niños y mascotas: desarrollo del sistema inmune
El doctor Jesús Garrido, pediatra y creador de la aplicación "Bebé sin cólicos", asegura que el contacto con mascotas desde el primer día de vida puede fortalecer el sistema inmune de los niños. El exceso de higiene y la esterilización excesiva pueden resultar contraproducentes, ya que impiden que el sistema inmunitario del bebé se exponga a agentes externos y se desarrolle correctamente. Esta falta de exposición temprana puede aumentar el riesgo de desarrollar alergias, dermatitis atópica y otras enfermedades.
Beneficios de la convivencia entre niños y mascotas
Convivir con una mascota, especialmente un perro, desde el nacimiento ofrece múltiples beneficios para los niños:
Fortalecimiento del sistema inmune.
Reducción del riesgo de desarrollar alergias.
Fomento del desarrollo emocional.
Los perros, por ejemplo, rompen con la "burbuja" de aislamiento que muchos padres intentan crear alrededor de sus hijos, exponiéndolos a un entorno más natural y rico en bacterias beneficiosas.
Es importante recordar que la convivencia con mascotas también implica responsabilidades. Los padres deben educar a sus hijos sobre el respeto hacia los animales y la importancia de la higiene, como lavarse las manos después de jugar con ellos.