Día Mundial del Dolor: cuando el dolor se convierte en enfermedad
El dolor es una experiencia sensorial y emocional desagradable, que puede estar asociada a un daño tisular real o potencial. Es una señal de alerta que nos indica que algo no funciona correctamente en nuestro organismo.
Cada 11 de octubre se celebra el Día Mundial contra el Dolor, una iniciativa que busca concientizar a la población sobre la importancia del tratamiento adecuado del dolor, en especial, cuando se vuelve crónico y afecta significativamente la calidad de vida de quien lo padece.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el dolor es el motivo de consulta médica en la mitad de los casos, y una de cada cinco personas en el mundo sufre de dolor crónico.
El dolor crónico se define como aquel que persiste por más de tres meses, incluso después de que la lesión o enfermedad que lo originó haya desaparecido. Puede ser debilitante e interferir con las actividades diarias, el trabajo, las relaciones sociales y el bienestar emocional.
Es fundamental destacar que el dolor no debe ser subestimado ni normalizado. Buscar atención médica para un correcto diagnóstico y tratamiento es crucial para mejorar la calidad de vida de las personas que sufren de dolor, ya sea agudo o crónico.