Con la llegada del verano, muchos padres se preguntan cuándo pueden llevar a sus hijos a la playa por primera vez.
Ir a la playa con un bebé: precauciones y consejos.
Es importante tener en cuenta que la piel de los bebés es mucho más sensible a la radiación solar que la de los adultos. Por eso, es fundamental tomar ciertas precauciones para protegerlos del sol.
El pediatra Jesús Garrido, creador de la aplicación "Bebé sin cólicos" y de la página web "Mi pediatra online", ofrece algunos consejos para ir a la playa con un bebé de forma segura.
Protección solar en bebés
En cuanto a la protección solar, Garrido desaconseja el uso de crema solar en niños menores de tres años. Esto no se debe a que la composición de la crema sea perjudicial, sino a que no quiere que los padres se confíen y expongan al niño al sol directo.
Existen cremas solares específicas para bebés a partir de los seis meses. En el caso de los menores de seis meses, es importante tener en cuenta que, cuanto más pequeño sea el bebé, más fácil es que su piel se pueda quemar o que sufra una insolación.
Evitar la exposición directa al sol
Los bebés se deshidratan con mucha facilidad, por lo que no es recomendable dejarlos en iglús de playa, ya que, aunque no les dé el sol directamente, la temperatura en su interior puede llegar a ser muy elevada. Lo recomendable en niños menores de seis meses es que no se expongan de forma directa al sol y, de forma indirecta, solo para llevarlos de paseo.
Mejores horas para ir a la playa con un bebé
Las radiaciones solares son acumulativas y, en las primeras etapas de la vida, la piel es mucho más sensible a ellas, por lo que es mucho más fácil que aparezcan quemaduras. Esto no quiere decir que no se pueda llevar al niño a la playa hasta los tres años, pero siempre hay que hacerlo con precaución, tratando de evitar las horas centrales del día.