La alimentación juega un papel crucial en nuestra salud. Si te interesa, no te pierdas el vídeo.
Más vídeos sobre salud en nuestros canales:
Microbiota TVNutriciónLa alimentación juega un papel crucial en nuestra salud. Si te interesa, no te pierdas el vídeo.
La alimentación juega un papel crucial en nuestra salud. En un contexto donde la esperanza de vida ha aumentado pero no siempre acompañada de años saludables, los alimentos funcionales emergen como aliados clave.
Estos alimentos no solo nutren, sino que también ofrecen beneficios adicionales demostrados científicamente, contribuyendo a prevenir enfermedades y mejorar la calidad de vida.
El concepto de "alimentos funcionales" nació en Japón en los años ochenta, impulsado por la necesidad de abordar el desequilibrio entre el aumento de la esperanza de vida y los crecientes gastos sanitarios. Su objetivo era claro: complementar la alimentación cotidiana con opciones que no solo nutran, sino que también mejoren la salud de manera tangible.
Los alimentos funcionales destacan por:
Consumirse en cantidades habituales dentro de la dieta diaria.
Presentarse como alimentos convencionales, no como medicamentos o suplementos.
Aportar beneficios adicionales para la salud, más allá de su valor nutritivo.
Carecer de efectos adversos cuando se consumen de manera responsable.
Contar con respaldo científico que avale sus propiedades saludables.
Uno de los mejores ejemplos de alimentos funcionales se encuentra en la dieta mediterránea. Rica en frutas, verduras, cereales integrales, pescado y aceite de oliva, esta dieta ofrece beneficios demostrados para la salud cardiovascular.
La prevención de enfermedades como hipertensión arterial, hipercolesterolemia y diabetes mellitus es solo uno de los muchos beneficios asociados con este estilo de alimentación.
El creciente interés por una alimentación saludable contrasta con el ritmo acelerado de la vida moderna. Comidas rápidas y falta de tiempo para planificar nuestras elecciones alimenticias son obstáculos comunes.
Sin embargo, los alimentos funcionales pueden integrarse fácilmente en nuestra dieta diaria, convirtiéndose en una herramienta práctica para cuidar de nuestra salud.
Elegir alimentos funcionales no solo tiene un impacto positivo en la salud individual, sino también a nivel poblacional. Una alimentación saludable puede ayudar a reducir la incidencia de enfermedades crónicas, lo que a su vez disminuye los gastos sanitarios y mejora la calidad de vida general.
Incorporar alimentos funcionales en nuestra dieta diaria es una decisión inteligente y accesible que beneficia tanto a nuestra salud como a la sociedad en general.
A pesar del sedentarismo y los desafíos de la vida moderna, optar por una alimentación saludable es un paso clave para mejorar nuestro bienestar.
qué son los alimentos funcionales y cuál es su importancia en la salud. Es una realidad que la esperanza de vida ha aumentado a nivel mundial y sobre todo en los países de Europa y de Asia. Sin embargo, los años de vida saludables no han aumentado de forma paralela. Esto nos lleva a pensar que probablemente en los próximos años tengamos un aumento de los gastos sanitarios. Es así como en la década de los ochenta nacen los alimentos funcionales en Japón, con un intento de que esa esperanza de vida aumentada y ese aumento de gastos sanitarios se pueda compensar de alguna forma en los alimentos funcionales. Los alimentos funcionales son aquellos que, aparte de su aporte nutritivo, va a estar siempre presente. Tienen además un añadido de aportarnos un beneficio en términos de salud. Se caracterizan por ser consumidos en cantidades habituales, por presentarse en forma de alimento, por tener ese beneficio adicional en términos de salud, que no tengan efectos nocivos y que ese beneficio esté demostrado científicamente. Es cierto que en el día a día vemos cada vez un interés aumentado en la población, ese etiquetado nutricional por ver qué aportes nutricionales tiene. Sin embargo, el ritmo de vida que llevamos acelerado, con un acceso cada vez más fácil a comida rápida, con un ritmo de vida que pocas veces nos permiten sentarnos a ver qué comemos, qué elegimos y cómo lo comemos. Hay un poco de disparidad entre los intereses y lo que el ritmo de vida nos permite hacer. De ahí la importancia de los alimentos funcionales. Si pensamos en qué tipo de alimentos nos pueden aportar estos beneficios, tenemos que pensar en uno de los ejemplos que tenemos más cercanos, como es la dieta mediterránea, formada por muchos alimentos que tienen demostrado un aporte beneficioso en términos de salud. Sabemos que ahora mismo, en el momento actual, la causa más frecuente de mortalidad son las enfermedades cardiovasculares, con unos factores de riesgo en forma de hipertensión arterial, hipercolesterolemia, diabetes mellitus y en todas ellas la alimentación es uno de los pilares fundamentales para su prevención. Los alimentos funcionales los tenemos día a día, comemos momentos todos los días de nuestra vida y sería algo en lo que podríamos mejor a nivel poblacional, eligiendo bien y aportando ese beneficio en términos de salud, con la disminución de los gastos sanitarios que ello conllevaría. como mensaje para llevarnos que los alimentos funcionales pueden tener un aporte beneficioso en nuestra día a día para nuestra salud, que podría suponer una mejora a nivel poblacional y que el ritmo de vida no siempre nos permite acompañarlo de otras actividades, como por ejemplo la actividad deportiva. Llevamos una vida muy sedentaria y sin embargo, comer tenemos que elegir comer bien todos los días.