Información sobre la adrenalina autoinyectable. ¡Piérdele el miedo!
¿Es posible perderle el miedo a la adrenalina autoinyectable? Nosotros creemos que sí. Lo primero que has de saber: la adrenalina es una hormona que revierte de forma rápida los síntomas de una reacción alérgica. Se comercializa en dispositivo autoinyectable en tres dosis de 0,15 mg, 0,30 mg y 0,50 mg. Una persona con alergia a alimentos con riesgo de anafilaxia debe llevar siempre consigo su dispositivo de adrenalina o inyectable, por si tiene una exposición inadvertida al alimento que puede poner en riesgo su vida. La anafilaxia es una reacción alérgica grave que pone en riesgo la vida de la persona que sufre alergia alimentaria.
¿Cuándo se debe administrar la adrenalina autoinyectable?
En una reacción de instauración rápida que comprenda dos o más de los siguientes órganos:
-Respiratorio: con tos, ahogo, pitos u opresión torácica.
Cutáneo: con picores, rojeces o ronchas.
-Digestivo: con vómitos, náuseas, dolor abdominal o diarrea.
-Circulatorio: con sensación de mareo, flojera o incluso pérdida de conocimiento,
¿Cómo se administra la adrenalina autoinyectable?
Es muy importante que el dispositivo esté a temperatura ambiente, pero no sometido a un exceso de calor, ya que así puede deteriorarse. Disponemos de tres dispositivos de adrenalina autoinyectable: dos de ellos tienen un tapón de seguridad que hay que retirar; el tercero no cuenta con este tapón de seguridad.
La manera correcta de administrarla es durante una reacción:
-Lo primero es inmovilizar al paciente, retirar el tapón de seguridad, colocarlo en la parte lateral del muslo sin retirar la ropa y de manera suave, pero presionando con fuerza, no hace falta hacer un gesto demasiado brusco.
-Se debe oír un clic. Después, hay que contar diez segundos para darle tiempo de actuar a la medicación.
-Por último, es conveniente masajear la zona.
El paciente que ha precisado la administración de adrenalina autoinyectable debería acudir a un centro de urgencias para ser evaluado tras la reacción.
Adrenalina autoinyectable en niños
-En niños de hasta veinte kilos: dosis de 0,15 mg.
-En los niños de más de veinte kilos y hasta cincuenta kg: dosis de 0,30 mg.
-En adultos y niños de más de cincuenta kilos: la dosis de 0,50 mg.
Además, es recomendable que el paciente o los familiares se entrenen en casa con los dispositivos caducados para, en el momento de necesitarlo, estar familiarizados con la técnica. Recomendamos utilizarlo, por ejemplo, con una naranja.
Para las personas asmáticas o con alergia a alimentos, o pacientes que hayan sufrido anteriormente anafilaxias graves, se recomienda siempre llevar dos autoinyectores.
Se puede repetir una segunda dosis de la adrenalina autoinyectable, entre cinco y quince minutos después de la primera, si la reacción no está respondiendo o está empeorando,
Recuerda: las dosis están calculadas para evitar los efectos secundarios Estos serían:
-Nerviosismo
-Palpitaciones
-Temblores
Es muy importante saber que el control de la reacción anafiláctica es mucho mayor cuanto antes se administre la adrenalina. ¡Y no lo olvides: es mejor una adrenalina demás que una adrenalina de menos!